Elaboraciones artesanales y refrescantes con múltiples colores y presentaciones cremosas. Gustos clásicos y otros innovadores proponen recorrer la provincia de Buenos Aires desde Bahía Blanca y Monte Hermoso. Dos destinos turísticos destacados por sus paisajes, locaciones y gastronomía con heladerías que prometen una explosión de sabor en el paladar.
Cremas heladas para disfrutar de circuitos imperdibles
El casco histórico de Bahía Blanca se remonta a 1828 con la construcción del fuerte militar Fortaleza Protectora Argentina, un auténtico tesoro de la arquitectura.
Entre recorridos por edificios históricos muy bien conservados las y los visitantes podrán probar sus gustos de helado favoritos. En Flavor -IG: @FLAVORHELADOS- los producen como era en la década del 80: sabor por sabor y con materias primas naturales que logran un producto óptimo y diferencial.
El local tiene certificación de elaboración sin tacc en todo lo que comercializan. «Hay muchísima gente con celiaquía y muy pocas opciones en lo que refiere a variedad. Tenemos clientes que nos dicen emocionados: ¡es el primer cucurucho que podemos comer! Eso para nosotros es muy gratificante porque creemos en el desarrollo de un bienestar social en comunidad», aseguró Luciano Mazzola, integrante del emprendimiento.
Sus más de cincuenta sabores se pueden combinar a elección. El pistacho se lleva todos los premios. «Debe ser el mejor pistacho del mundo», afirmó Luciano. Además innovaron con creaciones con roquefort y palta. «Cuando preparamos algo natural y artesanal te queda la satisfacción de que la gente lo prueba, le gusta y nota la diferencia«, agregó.
Espacio Aruma -IG: @ESPACIOARUMA– ofrece un manjar especial: Chocolate Aruma, cien por ciento base de chocolate con dulce de leche y notas de café. «Además de heladería con gustos sin tacc, tenemos cafetería, pastelería, chocolatería y organizamos espectáculos musicales y eventos. A quienes nos visitan les decimos que no dejen para mañana el helado que pueden comer hoy», contó el emprendedor Pablo Hernández.
Pasear por Bahía Blanca con alguno de estos helados en la mano mientras se comparten historias y relatos puede ser una experiencia inolvidable. Para volver y repetir siempre.
Degustaciones con vistas inolvidables
Las playas de Monte Hermoso son un atractivo inigualable. Es el único sitio de Argentina donde -por su ubicación de este a oeste- el sol sale y se pone en el mar. Sus aguas cálidas tienen cinco grados por encima del resto de la costa atlántica. Son amplias y la arena es suave.
Inaugurado en 1906, allí se encuentra el faro con estructura abierta más alto de Sudamérica, y la Reserva Natural Pehuen-Co, con huellas prehistóricas de diecisiete mil años: un lugar inigualable ubicado en la provincia de Buenos Aires.
Degustar las cremas heladas artesanales de Il Volo -IG: @IL.VOLO.GELATO.MONTE.HERMOSO– complementan la aventura de conocer un destino turístico soñado. ¿Te imaginás ahora tomando un helado en alguno de estos paisajes de película?
«Las personas que vienen al local nos dicen que les encanta nuestro helado por sus sabores intensos y reales, y su cremosidad. Nuestro Sambayón, el Tiramisú y sobre todo el Dulce de leche Il Volo, se llevan todos los primeros premios», detalló Natalio Peralta, a cargo del comercio que cuenta con un sistema de socios para clientes locales y turistas, quienes acceden a descuentos exclusivos.
Una invitación a explorar la provincia de Buenos Aires combina postales naturales y arquitectónicas con deliciosos sabores de elaboración artesanal en Bahía Blanca y Monte Hermoso. Una experiencia culinaria auténtica para disfrutar los días de calor y todo el año.